Pregunta: Agradecería
recibir información sobre la vida de san roque y el porque se lo asocia
con un perro. Desde ya muy agradecido y lo felicito por el
impresionante trabajo que realiza, lo claro y bien completo de las
respuestas. He pasado horas leyendo en su blog un poco de cada cosa,
desburrándome un poco. Argentina.
Respuesta: Gracias por dedicarle tantas horas al blog, me halaga que te guste.
San Roque de Montpellier, peregrino. 13, 16 y 18 de agosto.
De San Roque hay algunos datos históricos, pero lo más que se sabe es por tradición oral, aunque de existir, existió, eso no tiene duda. Así que ni es un mito celta, ni una antigua divinidad pagana reconvertida. Estos pocos datos afirman que nació en 1350 (no en 1295, como se decía antes) y nació en una familia de clase media. Desde su nacimiento tenía un curioso lunar en forma de cruz que, típico de los tiempos, fue tomado como una señal divina.
San Roque de Montpellier, peregrino. 13, 16 y 18 de agosto.
De San Roque hay algunos datos históricos, pero lo más que se sabe es por tradición oral, aunque de existir, existió, eso no tiene duda. Así que ni es un mito celta, ni una antigua divinidad pagana reconvertida. Estos pocos datos afirman que nació en 1350 (no en 1295, como se decía antes) y nació en una familia de clase media. Desde su nacimiento tenía un curioso lunar en forma de cruz que, típico de los tiempos, fue tomado como una señal divina.
Muy
joven, Roque perdió a sus padres y decidió hacerse peregrino y atender a
los necesitados, por lo que dio todo su dinero a los pobres y confió a su
tío administrar sus bienes en beneficio de estos. Se dirigió a Roma,
pero deteniéndose en cada sitio que podía cuidar enfermos e inválidos.
En Roma estuvo tres años y, de regreso a su casa, pasando un tiempo en
Piacenza, atendiendo a los enfermos, quedó contagiado de la peste.
Desalojado
de la ciudad, donde tanto bien había hecho, se refugió en un bosque,
esperando morir. Alli, día tras día, un perro le llevaba un trozo de
pan; el dueño del perro, que no era hombre piadoso ni siquiera una buena
persona, quedó admirado por semejante hecho y se convirtió, arregló sus
asuntos y cambió de vida. Contra todo pronóstico, Roque sanó de la
peste, se dirigió a su tierra, que estaba en ese momento en guerra. No
fue reconocido, sino tomado por un espía, y sin juicio alguno lo
enviaron a la cárcel, y según la historia estuvo entre 5 y 8 años entre
rejas, donde murió. La leyenda dice que, al ser preparado su cadáver, su
abuela lo reconoció por el lunar.
Esto
es la historia, pero como siempre… hay una leyenda creada
posteriormente y que busca florear la vida del santo, hacerla más
vistosa: Roque
era hijo de Juan y Libera, príncipes de Montpellier y descendiente de
la Casa Real francesa. Sus padres no podían tener hijos y rogaron a la
Virgen María les concediera un hijo. Nacido este (con lunar incluido),
le llamaron Roque. El niño se abstenía del pecho de su madre dos días a
la semana, para ayunar. A los siete años ya hacía todo tipo de obras
piadosas y caritativas. Entonces su padre cayó enfermo y le dijo: “Roque,
me estoy muriendo. Como legado te dejo cuatro cosas; la primera, servir
a nuestro Señor Jesús; la segunda, servir siempre a los pobres; la
tercera, te nombro dueño de mi propiedad y bienes, que deberás emplear
en beneficio de los pobres; la cuarta, que siempre haya en tus casas,
espacio para pobres, enfermos y huérfanos”.
Cuando
Roque tenía 20 años, su madre murió y él se dedicó a visitar las casas
de los pobres, a ayudar a enfermos y necesitados de palabra y obra. A
las chicas pobres les dotaba para que pudieran casarse, en fin, que todo
lo que su padre le había dejado lo dio a los pobres. Cuando consideró
que había cumplido a su padre, decidió llevar vida de peregrino. Después
de un largo viaje por varias regiones, llegó finalmente a Roma, que
estaba llena de apestados. Obtuvo alojamiento en el palacio de un
cardenal que, al poco tiempo, también cayó enfermo, pero Roque lo sanó
haciéndole la señal de la cruz.
Permaneció
tres años con el cardenal, dedicado a los enfermos y los pobres, sin
revelar su origen noble. Cuando el cardenal murió, se fue a Piacenza,
pues había oído decir la peste hacía estragos allí. Se llegó al hospital
donde pasó mucho tiempo acogiendo pobres, hasta que un día tiene la
visión de un ángel que le dice: "Roque, levántate y prepárate a sufrir
tu propia llaga”. En ese momento se dio cuenta de que había enfermado de
peste, por lo que fue arrojado por los mismos que hasta hacía poco
atendía. Algunos protestaron, pero el dueño del hospital mintió: "El peregrino enfermó de la peste y se fue en contra de nuestra voluntad”.
Algunos
lo buscaron, temerosos que Dios les castigara con más plagas, por
arrojar a un hombre tan bueno, pero no le hallaron. Roque se fue a un
bosque, donde se hizo una choza. Por un milagro, de la tierra brotó una
fuente que le daba agua. A los pocos días apareció el perro con el pan
en la boca, y el ya conocido dueño, llamado Gottard que le persigue y
halla a Roque, que le dice: "amigo, aléjate de mí, porque tengo la plaga”.
El joven se va, pero regresa impactado si no debía hacer lo mismo él,
que es cristiano, mientras su perro es un animal. Roque le contestó que
aunque cumpliera los mandamientos, que dejara todo, se hiciera pobre con
los pobres, salvaría su alma y ocurriría un milagro. Así fue, Gottard lo
dejó todo, se dedicó a los pobres a pesar de su familia y entonces
llegó el milagro: sanaron los apestados de Piacenza.
Entonces,
Roque oró para que Dios le librase de su enfermedad, y así pasó. Se
dirigió a su tierra natal y pasó lo que ya sabemos. Error, cárcel,
muerte, reconocimiento y entierro solemne, salvo que la leyenda incluye
otros detalles: una intervención mariana, la confesión y comunión y un
pergamino en el que Roque aclara quien es en verdad.
En
1485 las reliquias fueron trasladados desde Montpellier a Venecia,
hecho que desplegó su culto por toda Europa, sobre todo gracias a los
franciscanos, que le hicieron terciario de su orden. Las primeras
representaciones del santo están en Nuremberg y Bingen, asimismo los
primeros traslados de otras reliquias fueron a Amberes. Así que fueron
los Países Bajos los que fomentaron más su culto. En los campos de
Francia, el 16 de agosto se bendicen hierbas que mezclan con el forraje,
para la protección del ganado.
Es
patrón contra la peste, el cólera y otras epidemias, y para el dolor en
los pies, las rodillas y las piernas, la rabia, la peste y todo tipo de
accidentes y llagas. También protege a presos, enfermos, hospitales,
hospicios, médicos, cirujanos, farmacéuticos y sepultureros, peregrinos,
agricultores, jardineros, vinateros, camineros, carpinteros,
fabricantes de fuegos artificiales, marinos y carreteros. También es
patrono de las ciudades de Montpellier, Parma, Venecia y cientos de pueblos.
Su iconografía aunque variada, es abundante y perfectamente reconocible: viste de peregrino (bastón con calabaza, sombrero, esclavina con concha).
Suele levantar la ropa con un bonito gesto, para mostrar las llagas, y
casi siempre le acompaña el perro, que lleva el pan en la boca, y a
veces un ángel. Su fiesta es el 16 de agosto, pero también aparece a 13 ó
18 del mismo mes.
Fuentes:
-“La leyenda de oro para cada día del año”. Volumen 2. PEDRO DE RIBADENEIRA. Barcelona 1865.
-http://www.franciscanos.org/bac/sanroque.html
A 16 de agosto además se celebra a
Santa Triaise de Poitiers, reclusa.
San Teodoro de Octodorum, obispo.
Fuentes:
-“La leyenda de oro para cada día del año”. Volumen 2. PEDRO DE RIBADENEIRA. Barcelona 1865.
-http://www.franciscanos.org/bac/sanroque.html
A 16 de agosto además se celebra a
Santa Triaise de Poitiers, reclusa.
San Teodoro de Octodorum, obispo.
Tal como dice el artículo, los franciscanos lo siguen considerando terciario de su Orden y por ello aparece en su calendario, aunque sea únicamente para la Tercera Orden Regular y con la mínima categoría de memoria libre. El "Propio de la familia franciscana" de la Liturgia de las Horas (edición de 1983) sigue señalando las fechas tradicionales de 1295-1327. Su oración propia es la siguiente: "Guarda, Señor, a tu pueblo con bondad, y, por la intercesión de san Roque, líbrale de todo contagio del cuerpo y del espíritu. Por Jesucristo, nuestro Señor". En la edición española del Martirologio Romano se señala como fecha de la muerte circa 1379.
ResponderEliminarEn Rota (Cádiz) existe una Capilla es su honor. Desgraciadamente en la guerra civil se perdió su imagen y su retablo. Hoy solo tiene una pequeña imagen de Olot, el altar mayor lo ocupa en Sto. Cristo de la Vera-Cruz.
ResponderEliminarSiempre le tuve mucha fe, aunque tuve dudas de su existencia por otras webs, me alegra mucho saber que fue una persona real. Gracias