Mostrando entradas con la etiqueta Virgen María. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Virgen María. Mostrar todas las entradas

domingo, 9 de mayo de 2021

María, fuente de consuelo para los vivientes.

Nuestra Señora de los Milagros de Mauriac. 9 de mayo.

En el origen de esta devoción mariana se encuentra la princesa Santa Theodechilde (28 de junio). Esta princesa gustaba de la soledad y vivía retirada en Mauriac, en el “Castrum Vetum”, un castillo de la época romana, adaptado a las necesidades de su momento. Era una torre alejada de la ciudad, en medio del bosque, donde la reina hallaba gusto en la soledad, en los ratos que no dedicaba a los asuntos del mundo que aún la retenían. 

Una tarde en que salió de paseo, vio una luz muy brillante que descendía del cielo sobre el bosque, sin moverse. No se atrevió a averiguar que era, sin antes pasar una noche en oración, pidiendo a Dios. Por la mañana se adentró en el bosque, camino del punto donde caía la luz, y al llegar vio una leona con tres leoncillos. Trazó la señal de la cruz, y las cuatro fieras se postraron ante ella y desaparecieron. Esa noche tuvo una visión en la que aparecían la Santísima Virgen con el Niño, y precediéndola San Pedro, que daba una vela encendida a la Madre de Dios. Luego de presentarse ante Theodechilde, tomaron camino del bosque, hasta el sitio donde antes había visto la leona y sus cachorros. Allí, en medio de ángeles, la Señora señaló al suelo y desapareció. 

Al otro día, Theodechilde se encaminó al sitio y halló de nuevo a las fieras, que le cedieron su sitio, alejándose en el bosque. Llegó Theodechilde al punto exacto que había señalado la Virgen María y halló una piedra de mármol con una vela encendida, la misma que San Pedro había dado a Nuestra Señora. Junto a esta, había un pergamino escrito en hebreo, que la reina envió a San Remigio (1 de octubre), el cual lo envió al papa, quien lo entregó a Boecio para que lo interpretara. Según este, el texto decía: "Este lugar será el sitio de Temor del Señor, y será una fuente de consuelo para los vivientes." Así que Theodechilde entendió que San Pedro quería que además del monasterio que ella estaba planeando edificar, se edificase un santuario a la Santísima Virgen.  

Entonces la reina mandó construir una capilla en honor de Nuestra Señora, poniendo como altar la piedra de mármol y sobre este la vela inconsumible. En solo tres meses, los obreros construyeron la iglesia, dándose el milagro que no se cansaban por más que trabajasen, y cada uno rendía por cuatro. Fue bendecida por un legado del papa San Símaco (19 de julio) el 25 de diciembre de 507, y llamada Nuestra Señora de los Milagros. Para presidirla, el rey Clodoveo envió desde Roma una imagen revestida en plata, que habría sido tallada por San Marcos Evangelista (25 de abril). Esta fiesta de Nuestra Señora de los Milagros se celebra aún en Mauriac a día de hoy, y el domingo siguiente a este día.  

En 1631, por los 900 años de la fundación del monasterio anexo a la iglesia de Nuestra Señora de los Milagros de Mauriac, se dedicó una de las capillas de la iglesia a la memoria de su fundadora, la reina Theodechilde. El 13 de mayo de 1855 la imagen de Nuestra Señora sería coronada canónicamente. En 1921 la iglesia fue elevada a Basílica por el papa Benedicto XV.

Fuente:
-“Sainte Theodechilde, vierge. Fille de Clovis. Foundatrice du monastère de Saint-Pierre-le-Vif”. ABBÉ J.-B. CHABAU. Aurillac, 1883. 


A 9 de mayo además se celebra a:

Santa Catalina de
Bolonia, clarisa.
San Mumbol,
eremita y abad
.
San Beato de Thun,
eremita.
San Tudy, abad.








viernes, 2 de abril de 2021

Nunca perdió el horizonte contemplativo.

Beato Nicolás de Francia, VI General Carmelita. 2 de abril. 

Nació en Narbona, Francia, a inicios del siglo XIII. Los hagiógrafos de la Orden le hacen carmelita en el Monte Carmelo, adonde habría llegado luego de participar en alguna Cruzada. Sería de aquella tercera generación de monjes que seguían la Regla dada por San Alberto de Jerusalén (17 de septiembre) sobre 1209. Habría tomado el hábito siendo General el Beato Alano de Bretaña (12 de noviembre). 

En 1250 habría sido nombrado Vicario de Tierra Santa por San Simón Stock (16 de mayo). Eran los tiempos en que los carmelitas tenían dos frentes abiertos. El primero, el creciente peligro de los musulmanes en Oriente, que hacía peligrar su permanencia en el Carmelo. El segundo, en Europa las Órdenes Religiosas se oponían al establecimiento de una orden eremítica. Ni los monjes los querían, ni los mendicantes. Finalmente los carmelitas tuvieron que abandonar el ideal cenobítico de Oriente para pasar a ser una Orden mendicante más. Tuvieron que adaptarse a vivir en ciudades, a predicar, vivir en conventos y tener culto público. 

De Nicolás se nos dice que tuvo una aparición de la Virgen María en la cual la Virgen le prometía la ayuda del papa Inocencio III y la de un rey santo, el cual pronto le visitaría. Se refiere a esto, a la visita que San Luis Rey de Francia habría hecho al Monte Carmelo y que recoge Guillermo de Sanvico, “cronista” de la Orden. En 1260 Nicolás emprendió la reconstrucción de la basílica de la Virgen en el Carmelo, avalada por San Simón y el papa Urbano V, cercano a Nicolás, pues antes de ser papa había sido Patriarca de Jerusalén. Esta iglesia y el monasterio serían destruidos pocos años más tarde por los musulmanes, más en el siglo aún en el siglo XV Guillermo de Harlem describe sus ruinas como esplendorosas: “era una iglesia tal, que nunca he visto una mayor; tenía la bóveda decorada de mosaicos”. 

Volviendo a Nicolás y su “vita”. El 16 de mayo de 1265 murió San Simón y el 24 del mismo mes fue elegido Nicolás para sucederle como General de la Orden, en el Capítulo de Tolosa. En agosto del mismo año Nicolás volvió a Francia para hacerse cargo de la Orden, con vistas a trasladarla tal vez para siempre a Europa. El 5 de agosto ocurrió en la iglesia de los carmelitas de Tolosa un portento: un enemigo de los frailes asaltó el convento e incendió la puerta del mismo. Antes de irse, le ocurrió que quedó paralizado y su cabeza se torció horriblemente quedando vuelta completamente. El hombre se arrepintió de su maldad y el Beato Nicolás clamó a la Santísima Virgen que perdonara a aquel desgraciado, y la Señora le devolvió la salud. En agradecimiento, el hombre puso una placa en el convento, al cual luego entró posteriormente, siendo un humilde y santo religioso. 

En el mismo 1265 el General Nicolás logró que el papa Clemente IV otorgara Bulas de protección a los carmelitas, pidiendo a los obispos que ayudasen a los frailes a establecerse en sus ciudades. También se emitirían otras mandando se respetara que celebrasen el rito jerosolimitano, que participasen de las limosnas de la ciudad, etc. En 1268 los carmelitas del Carmelo serían martirizados por el Islam, y el convento e iglesia derruidos. La presencia carmelita se apagaría en el Carmelo durante casi 400 años, hasta que en 1631 el Venerable Próspero del Espíritu Santo volviera a fundar un convento allí. Pero esa es otra historia. 

En 1270 el Beato Nicolás renunció al Generalato y se retiró al monasterio más apartado de ciudades y universidades que pudo. Era un convento pequeñito en el Monte Erratroff, en Orange. Allí, en el poco tiempo que tuvo de vida, escribió su “Ignea Sagita”, un libro cuyo objetivo era que los religiosos no olvidaran el origen eremítico de los carmelitas ahora que vivían en las ciudades. Llamaba a no dejarse llevar por el amor desmesurado a los estudios, las universidades, las cortes palaciegas, llamándoles a no perder de vista el horizonte contemplativo de la Orden. 

Nicolás subió al Eterno Monte de la Perfección el 2 de abril de 1272 a las 3 de la tarde, mientras miraba fijamente un crucifijo. Según Arnoldo Bostio numerosos milagros ocurrían en su tumba en Orange. 


Fuente:
-"Flos Sanctorum del Carmelo". P. SIMEÓN MARÍA BESALDUCH, O.Carm. Barcelona 1951.


A 2 de abril además se celebra a










MI LIBRO ELECTRÓNICO

"TUS PREGUNTAS SOBRE LOS SANTOS

(SANTOS PATRONOS DE LAS ENFERMEDADES)

YA ESTÁ DISPONIBLE.

sábado, 9 de enero de 2021

Madre, educadora y pionera.

Beata Alicia Le Clerc, virgen fundadora. 9 de enero y 14 de octubre, traslación de las reliquias.

Nació el 2 de febrero de 1576 en Remiremont, los Vosgos. Fue una niña alegre y despierta, estudiosa y gustaba de las cosas de la religón. La adolescencia le enfrió bastante la piedad, prefiriendo las fiestas, diversiones y compañía de amigos. A los 18 años su familia se mudó a Mattaincourt, una ciudad que crecía a ritmo vertiginoso. A los 21 años cayó enferma y tuvo que guardar cama, por lo cual se aisló de amigos y diversiones, teniendo que pasar la mayor parte del tiempo haciendo labores o leyendo. En este estado comenzó a leer un libro devoto y su vida cambió para siempre. Tomó en cuenta lo poco que había servido al Señor desde su niñez y apenas sanó totalmente comenzó una vida de seria piedad.

Supo que en Hymont, cerca de Mattaincourt había un piadoso sacerdote y quiso dirigirse con él. Fue San Pedro Fourier (9 de diciembre), con quien su vida estaría unida para siempre. Alicia quería dedicar su vida a Cristo, pero ninguna Orden monástica le atraía. Una moción interior de Nuestra Señora le indicó que su vocación estaba en darse a los pobres y necesitados. Fourier estaba en ese mismo momento planeando abrir una escuela para niñas y buscaba jóvenes para la empresa. Alicia supo que ahí estaba su respuesta y fue la primera, dando origen a la Congregación de Canonesas de Nuestra Señora. Seguían la Regla de San Agustín y su carisma central fue la formación de las niñas pobres, de las que nadie se acordaba. No solo se enfocaron en las niñas de familias católicas, sino que admitían incluso a las de familias protestantes, que no tenían otra opción educativa para sus hijas. Además de impartir clases, frecuentemente visitaban a los pobres, cuidaban enfermos y huérfanos.

Alicia y otras cuatro jóvenes tomaron el hábito el 25 de diciembre de 1597, haciendo votos privados. En 1606 establecieron la Casa Madre en Nancy. En 1617 llegó la aprobación diocesana de las Constituciones y en 1618 las canonesas de esta Casa profesaron solemnemente. Desde entonces se llamaría María Teresa de Jesús. En esta ocasión celebraron Capítulo y Alicia fue elegida superiora de las demás. Junto a Fourier redactó las Constituciones de la Congregación. Las Canonesas vivían en clausura, como era la usanza, hacían votos públicos y solemnes. Además, signos de los tiempos, admitieron Hermanas de votos simples, que salían a las calles y vestían un hábito propio para ello. Esta idea sería fundamental para la fundación de la "Congregación de Nuestra Señora", fundada por Santa Margarita Bourgeoys (12 de enero), para la evangelización y la educación de los indígenas el Canadá.

Nuestra Beata falleció el 9 de enero de 1622, dejando varias casas fundadas. Fue sepultada en un ataúd de plomo en Nancy. Durante la Revolución Francesa sus religiosas tuvieron que padecer mucho y la Congregación fue disuelta. La Casa de Nancy fue demolida. En 1814 algunas lograron reunirse y refundaron la Congregación. Otras, como la Beata Teresa Gerhardinger (9 de mayo), fundaría en 1833 las "Hermanas Educadoras de Nuestra Señora".

Sepulcro de la Beata.
Catedral de Nancy.
A finales del siglo XIX las religiosas comenzaron a promover que su fundadora fuera canonizada, pero tropezaron con el escollo de que no había reliquias de ella, un requisito para entonces insalvable. Gestiones de prelados y otros religiosos hicieron que, por excepción, Roma obviara esta norma en el caso de Alicia, debido a su fuerte ejemplo entre las maestras católicas. Finalmente, Pío XII la beatificó el 4 de mayo de 1947. Tres años más tarde unos jóvenes de Nancy hallaron una especie de sótano y se metieron a explorar, cuando dieron de bruces con un ataúd de plomo. Hechas las investigaciones, no hubo dudas, era la Beata Alicia. El reconocimiento oficial y la traslación a la Escuela de Nuestra Señora se realizaron en 1960. El 14 de octubre de 2007 fueron trasladados a la catedral de Nancy.

A 9 de enero además se recuerda a:

San Andrés Corsini,
obispo carmelita
.
Beato Antonio Fatati,
obispo.
S. Adrián de Canterbury,
abad
.











viernes, 21 de septiembre de 2018

"No es el sexo, sino el valor lo que hace fuerte".

Santa Débora, juez y profetisa. 21 de septiembre, 11 y 14 de diciembre (Iglesias Orientales).


Añadir leyenda
La Escritura habla poco de Débora, pero lo suficiente para que salte a la vista el hecho de ver a una mujer como juez del pueblo de Dios. Los Jueces ejercían un liderazgo moral, político y religioso. En tiempos en que aún Israel aun no tenía reyes los Jueces eran, junto a los profetas, la voz de Dios y por Él se les consideraba elegidos. No eran gobernantes propiamente dicho y ninguno pretendió ser superior a los demás. Los Jueces fueron Otoniel, Aod, Samgar, Gedeón, Abimelec, Tola, Jaír, Jefté, Ibzán, Elón, Abdón, Sansón, Samuel y nuestra Débora.

La principal acción de Débora, quien dictaba sentencia bajo una palmera entre Rama y Betel, en favor de Israel fue animar al general Barac a lanzar las tropas israelitas sobre el cananeo Sísara. Le profetizó que vencerían, aunque él no vería el triunfo. Efectivamente, Israel vencería, pero quien mataría a Sísara sería Jael, mujer del cananeo Héber. Al ocurrir la victoria, Débora habría entonado un cántico a Dios.

Y poco más podemos decir de su biografía. Pero aún así, su figura ha sido evocada por numerosos padres de la Iglesia y santos han mirado a Débora como prefiguración de la Iglesia, de la Santísima Virgen, puesta como ejemplo para las mujeres, o comparada con el alma cristiana imbuida de Dios:




"Y así, de acuerdo con la historia, para que las mentes de las mujeres pudieran asentarse, una mujer se convirtió en una juez, una mujer que puso todo en orden; una mujer que profetizó; una mujer que triunfó; y que se unió a la batalla, enseñó a los hombres a la guerra bajo el consejo de una mujer. Pero en un misterio, es la batalla de la fe y la victoria de la Iglesia". San Ambrosio.
"Y creo que su judicatura ha sido narrada y sus hechos descritos, que las mujeres no deben ser restringidas de actos de valor por la debilidad de su sexo. Una viuda, gobierna al pueblo; una viuda, dirige ejércitos; una viuda, elige generales; una viuda, determina guerras y ordena triunfos. Por lo tanto, no es la naturaleza la que causa la debilidad. No es el sexo, sino el valor lo que hace fuerte". San Jerónimo.
"Nada es más poderoso que una mujer piadosa y sensible para poner a un hombre en orden y moldear su alma como ella quiera. Porque no soportará a los amigos, ni a los maestros, ni a los gobernantes, como lo hará con su pareja aconsejándole y aconsejándole, pues el consejo lleva consigo incluso cierto placer, porque la que da el consejo es muy amada. Podría hablar de muchos hombres duros y desobedientes que han sido ablandados de esta manera. (…) Una mujer destruyó Absalón, una mujer destruyó Amnón, una mujer rescató a Nabal de la matanza. Las mujeres han preservado naciones enteras, pues Débora y Judit exhibieron éxitos dignos de los hombres; así también lo hacen otras diez mil mujeres". San Juan Crisóstomo.

Y, además, tenemos el detalle poco conocido de que Santa Teresa de Jesús (15 de octubre; 26 de agosto, la Trasverberación; 13 de julio, Traslación de las reliquias) es llamada "la Nueva Débora" por el papa Gregorio XV en la Bula de Canonización. Este "piropo" daría pie a una iconografía particular que San Enrique de Ossó (27 de enero) promovería para la Institución Teresiana. Pero habría que dejarlo para otro artículo.

A 21 de septiembre además se celebra a:


Beato José Vila Barri,
presbítero HSF y mártir
Santa Efigenia,
virgen carmelita.
San Cuadrato de Atenas,
obispo y mártir
.



martes, 18 de septiembre de 2018

Por los Dolores de María, los niños y el martirio.

Beato Ambrosio María de Torrent, presbítero Terciario Capuchino de la Virgen de los Dolores y compañeros mártires. 18 de septiembre.


Beato Ambrosio María.
El Beato Ambrosio María, quien encabeza esta lista nació en Torrent, Valencia, el 16 de abril de 1866, y fue bautizado como Salvador Chuliá. Cursó los estudios eclesiásticos en el Seminario Conciliar de Valencia, pero apenas recibió el diaconado, tomó el hábito de los Terciarios Capuchinos de la Virgen de los Dolores. Esta Congregación fue fundada por el obispo Venerable Luis Amigó y Ferrer, para dedicarse a la educación de niños y jóvenes, y a la reeducación de los menores con problemas sociales y peligro de exclusión. Comúnmente se les llama "amigonianos".

Fue ordenado presbítero el 4 de abril de 1892 y profesó solemnemente el 5 de julio de 1898. Fue un presbítero culto, gran confesor y director espiritual de religiosos y alumnos. Devoto de la Eucaristía, humilde, paciente y muy obediente, fueron las características recordadas por quienes le conocieron.

Iniciado en España el Alzamiento en julio de 1936, toda la zona Valenciana quedó bajo el control de los comunistas, quienes se dedicaron a una pensada masacre del clero y los católicos. Los religiosos Terciarios fueron desalojados de su convento-colegio el 20 de julio del mismo año. Ambrosio fue apresado el 21 de agosto y conducido a la prisión "La Torre", de su natal Torrent. Allí, junto a 9 terciarios capuchinos más, llevó vida de religioso. Oraban, cantaban y se predicaban y alentaban unos a otros. Los días 15 y 17 de septiembre especialmente animosos cantaron el Oficio Divino, pues eran los días de su Madre Dolorosa y la Estigmatización del Padre San Francisco. El 18 de septiembre Ambrosio fue sacado de la cárcel y llevado a "La Mantellina", donde fue asesinado por los comunistas, junto a otros sacerdotes y religiosos. Sus reliquias se veneran en la Capilla de los Mártires, en la iglesia conventual de Santa María de Monte Sión, Torrent.

El Beato Modesto María, nació como Vicente Gay, el 19 de enero de 1885. Desde niño fue terciario franciscano como sus padres. Con los Terciarios Capuchinos estudia y con ellos toma le hábito el 6 de enero de 1903, emitiendo los votos perpetuos en 1911. Siempre quiso ser sacerdote, pero los superiores prefirieron fuera Hermano Coadjutor, dedicado a la formación laboral de los jóvenes extraviados y reeducados. En 1916 fue destinado a Torrent, donde fue educador y ecónomo de la casa religiosa. Fue hombre recto, escrupuloso en su trabajo, sencillo y humilde. Estallada la guerra, los comunistas le apresaron el 8 de septiembre de 1936, de donde fue sacado el 18 del mismo mes para ser asesinado. Sus reliquias también se veneran en Santa María de Monte Sión, Torrent.

El Beato Valentín María fue bautizado como Vicente Jaunzarás Gómez, habiendo nacido en Torrent, el 6 de marzo de 1896. También fue educado Terciarios Capuchinos, tomando su hábito el 15 de octubre de 1911 y profesando perpetuamente en 1920. Fue un excelente educador, verdadero padre de los muchachos necesitados de un buen ejemplo que seguir. Era recto, pero comprensivo, alegre, optmista y muy piadoso. Su gran voz fue oída en medio pueblo cuando cantaba durante su reclusión, desde el 28 de agosto de 1936 hasta el 18 de septiembre, cuando con los demás fue sacado de la prisión y asesinado a causa de su fe católica y condición de sacerdote.


Beato Francisco María
El Beato Francisco María se llamó Justo Lerma Martínez, y nació en Torrent el 12 de noviembre de 1886, siendo hijo de terciarios franciscanos. Vistió el hábito "amigoniano" el 14 de abril de 1905, y en 1907 profesó sus primeros votos. Fue destinado a Yuste, Cáceres, donde se desempeñó como religioso coadjutor. En 1912 fue trasladado al Colegio Fundación Caldeiro, Madrid, donde vivió 25 años como profesor, siéndolo además, notable. Además, era parco, serio y muy esforzado en la educación. Cuando arreció la persecución religiosa en 1936, los religiosos y los alumnos fueron expulsados de su Colegio, que fue transformado en Checa, o sea, en un sitio de terror, torturas y crímenes de los socialistas y comunistas. Fray Francisco María se fue a su casa natal, junto a sus padres, donde fue detenido por orden del Comité, a finales de agosto. El 18 de septiembre sería asesinado con sus hermanos de hábito y otros presbíteros.

Beato Recaredo María, religioso profeso de los Terciarios Capuchinos, nació en Torrent el 22 de agosto de 1874, siendo nombrado José María López Mora. Ingresó con los religiosos el 21 de junio de 1889, profesando el 8 de diciembre de 1896 en la Escuela de Reforma de Santa Rita, en Madrid, donde había sido trasladado. Nunca quiso ser sacerdote, sino religioso entregado a la educación. Fue muy caritativo y paciente con los jóvenes peligrosos que educaba. Era piadoso, observante e incansable en su labor educativa. Luego de años en Madrid, le destinaron a su pueblo natal, convento y colegio de Ntra. Sra. de Monte Sión, donde se empeñó en la fundación de las escuelas nocturnas para los jóvenes trabajadores. También organizó el catecismo parroquial.
Luego del Alzamiento fue expulsado del convento de Torrent, como todos los religiosos. El Hermano Recaredo quedó en casa de una sobrina hasta el 4 de agosto, cuando fue recluido con sus hermanos. Al amanecer del 18 de septiembre, juntamente con el P. Ambrosio y el P. Valentín, Fr. Modesto y Fr. Francisco, fue asesinado vilmente por "odium fidei".

Estos cinco atletas de la fe fueron beatificados por San Juan Pablo II el 11 de marzo de 2001.

Fuente:
"Héroes de Ayer y Siempre".

A 18 de septiembre se celebra además a:


San José de Cupertino,
franciscano conventual.
San Ferreol de
Vienne, m
ártir.
San Lantpert de
Friesing, obispo
.




domingo, 5 de agosto de 2018

"Maria Salus Populi Romani"

La Dedicación de Santa María la Mayor. 5 de agosto.

Basílica de Santa María.
En la liturgia de la Iglesia, la Dedicación de una iglesia es una ocasión festiva y solemne, cuya liturgia está plagada de un fuerte simbolismo que remite a la Jerusalén celeste, al paraíso, definitivo templo de Dios y del hombre. El templo cristiano es anticipo del paraíso, es lugar donde mora Dios y donde ocurre el encuentro del alma con Dios por medio del sacrificio eucarístico. Por ello, y muchas otras razones, la dedicación de la propia iglesia, al menos la iglesia catedral, siempre debería ser celebrada anualmente. En la liturgia de toda la Iglesia tenemos varias dedicaciones, la de las Basílicas de San Pedro y San Pablo, a 18 de noviembre, la del Salvador, a 9 de noviembre y a 5 de agosto, la de Santa María. Todas basílicas romanas y de todos los cristianos.

El origen de esta basílica quiere ser milagroso. Una leyenda, ampliamente conocida y por ello no me entretengo en contarla exhaustivamente, dice que fue edificada gracias a la generosidad de un matrimonio romano, y que el papa Liberio soñó con una colina nevada donde debía levantarse una iglesia dedicada a la Madre de Dios. Se dirigió el papa al monte Esquilino, donde efectivamente, la cima aparecía cubierta de nieve (en pleno agosto romano), por lo cual se decidió construirla allí mismo. Pero esta leyenda no aparece sino hasta muy tardíamente, y ningún escritor antiguo que habla de la basílica la menciona.


Leyenda de la nieve.
Fue dedicada solemnemente por el papa Liberio el 5 de agosto de 363, con la asistencia del emperador Constancio, el clero y varios obispos. Este dato nos da una pista importante: el culto mariano ya era fuerte en la iglesia como para que se le dedicara una basílica a la Santísima Virgen. Ciertamente hay otros indicadores más antiguos, pero este es uno irrefutable y perfectamente documentado. En 437, casi a punto de celebrarse su centenario y con ocasión de agradecer la proclamación dogmática de la Maternidad Divina en el Concilio de Éfeso, en 431, el papa San Sixto III (19 de agosto y 28 de marzo) reparó la basílica y la dotó con un ajuar de plata (altar, pila bautismal, cálices, etc.) del que San Jerónimo daría testimonio, admirado por tanta belleza, al visitarla unos 40 años después. También puso Sixto, según escribe el papa Adriano en una carta a Carlomagno, "muchas imágenes y pinturas de gran valor".

Fue llamada basílica liberiana, basílica sixtina, basílica de Santa María, quedando como definitivo Santa María “la Mayor”, para identificarla de las otras muchas basílicas marianas en Roma y, por supuesto "de las Nieves", por la leyenda someramente referida antes. También se le conoce como "del Pesebre", por hallarse allí una supuesta reliquia del pesebre en el que habría sido puesto Nuestro Señor al nacer. Pero en realidad se trata de un pesebre que formaba parte de un antiquísima representación plástica de la Natividad en la misma basílica.

La imagen de la Madre de Dios venerada en la basílica, un icono oriental del siglo VI, con una leyenda de haber sido pintado por San Lucas (como tantos) fue colocada en el altar mayor por San Gregorio Magno (12 de marzo y 3 de septiembre, elección papal), y a ella la invocó en en 593, en una magna procesión para clamar a Dios contra una epidemia de peste que asolaba la península itálica. A ella se encomendó el papa San Martín I (13 de abril) en 653, y ante ella celebraba la misa cuando un asesino pagado por el exarca de Rávena entró para asesinarle, quedando cegado por milagro de la Señora. En 1571 San Pío V (30 de abril) le encomendó la victoria de las tropas cristianas en la Batalla de Lepanto. No hubo santo que visitara Roma que no se encomendara a Nuestra Señora. Entre ellos San Ignacio de Loyola (31 de julio y 20 de mayo, Conversión), quien ante ella agradecería la aprobación de la Compañía de Jesús, y ante la cual los primeros religiosos ofrecieron sus vidas y las intenciones de profesar sus votos. La Compañía siempre tuvo especial devoción a esta imagen de la Madre de Dios, y que incluso propagó por parte de Europa y América.

Imagen de la Virgen
venerada en la Basílica.
En el siglo XIX, sería tanta su devoción, que sería llamada "Maria Salus Populi Romani". Gregorio XVI ordenó la coronación canónica el 15 de agosto de 1838 y el papa Pío XII la coronó, personalmente, en el Año Mariano de 1954. En 2000 Juan Pablo II la declaró Patrona de las Jornadas Mundiales de la Juventud. En 2013 y en 2016 fue llevada procesionalmente a la plaza de San Pedro para presidir sendas celebraciones pontificias. Este año de 2018 ha sido restaurada.


Fuentes:
-https://www.heiligenlexikon.de/
-http://heiligen-3s.nl/
-"Dos Mil años de Santos". Tomo II, Agosto-Diciembre. FRANCISCO PEREZ GONZALEZ. Ediciones Palabra, 2001.
-"Año cristiano o Ejercicios devotos para todos los días del año". Agosto. P. Jean CROISSET . S.J. Barcelona, 1863.

A 5 de agosto además se celebra a:


San Abel de Reims,
obispo.
Santa Afra de
Ausburg, mártir.
B. Guillermo Horne,
cartujo mártir.











martes, 12 de junio de 2018

Renuevo de Jessé y renovadora de la fe.

Nuestra Señora Santa María de Jessé. 12 de junio y Domingo posterior a este día.

El milagro.
El auge de esta devoción holandesa comenzó en 1327, luego de un estupendo milagro: vivía en La Haya, Holanda, una mujer llamada Machteld, quien había estado ciega durante tres años y medio. Había consultado a varios médicos y rezado muchísimo, pero su mal no remitía. Una noche tuvo un sueño en el cual se le animaba ir a la iglesia de San Bartolomé de Delft, donde la Virgen María la sanaría, para gloria suya.

Allá se fue la mujer, junto a su marido, un carnicero llamado Willem Jans. En esos días se había instalado en el trascoro de dicha iglesia un nuevo altar con una bella imagen de Nuestra Señora y al entrar Machteld había un sacerdote listo para decir misa en dicho altar. Humildemente Machteld se arrodilló y pidió a la Madre de Dios se cumpliera la voluntad divina. Comenzó la misa y llegada la Elevación, la buena mujer levantó la cabeza con gran fe ¡y se hizo el milagro!, pues en ese mismo instante recuperó la visión. Machteld clamó: "Señor Jesucristo, Hijo del Dios Vivo, bendito seas y bendita tu madre, María, porque yo estaba ciega y no podía ver, pero ahora puedo mirarte a ti y a ella con amor". El entusiasmo fue grande entre los presentes, se buscaron notarios y médicos que certificaran lo ocurrido. Por su parte, el pueblo fiel enseguida se hizo lenguas del caso y esa misma tarde, 12 de junio de 1327, se organizó una procesión con la imagen de Nuestra Señora. Y no solo eso, sino que la ciudad se comprometió con voto a realizar cada año la misma procesión solemne.

Y este no sería el último milagro realizado por Dios a los pies de la hermosa imagen de la Santísima Virgen, pues tenemos documentados al menos 8 más, sin contar las numerosas curaciones portentosas o no. Entre los milagros destacan los de tres niños ahogados y resucitados, una paralítica sanada ante el altar de la Virgen, un niño asfixiado por un alfiler y muerto, que revivió.

El culto. La Magna Procesión.
El culto a Nuestra Señora tomó un gran auge y durante siglos fue la imagen más honrada de la ciudad. Las beguinas se encargaban del ornato de su altar y ornamentos para sus misas. Consta que, aunque es una talla, le confeccionaron ropas para vestirla "a la española", como se suele decir en aquellos lugares a las imágenes vestidas. En 1347 se funda una Cofradía encargada de sostener con oraciones y limosnas el culto a María. Todos los viernes había Vísperas de Nuestra Señora y los sábados una misa en honor de la Santísima Virgen. En 1348, Guillermo de Baviera, Conde de Holanda, tomó la Cofradía bajo su protección personal y la de su Casa Condal, dotándola de los estipendios necesarios para el mantenimiento del sacerdote encargado de los cultos. En 1398 el Papa Bonifacio IX concedió Indulgencia Plenaria a todos los que asistieran a la procesión anual de Delft.


La sanación de Machteld.
Fue esta procesión la que, en el siglo XVI, daría nombre a la imagen como "de Jessé", y es por esta causa: En la procesión anual, esplendorosa como pocas, cada gremio de la ciudad debía representar un misterio bíblico o de la fe, o de la vida de un santo. Por ejemplo, los cerveceros se encargaban de la representación del infierno, y la cofradía de San Úrsula, como no, de pasos de la leyenda de esta santa. Pues bien, el gremio de carpinteros creó una espectacular carroza con el tema de la genealogía de Cristo, representada con un árbol de que brota del costado de San Jessé (4 de noviembre).

María "de Jessé".
Y me permito algunos apuntes sobre este bello tema iconográfico antes de seguir con nuestra historia: Entre los siglos XII y XIII la mística y la liturgia comienzan a interesarse más por el Cristo Hombre. Si habían pasado los siglos sobre las peleas sobre la divinidad del Señor, ya aclarada, es la Sagrada Humanidad la que a comienzos del Renacimiento se comienza a experimentar, representar y predicar. En el arte surgen imágenes más naturalistas del Señor, la Virgen y los Santos, siempre buscando más cercanía a lo humano.

En este movimiento surge la representación de la genealogía de Cristo a partir de Jessé. Lo cotidiano es ver a Jessé tumbado durmiendo y brotar de su costado un tronco que se ramifica y sobre cada rama aparecer los reyes de Israel, antepasados de Cristo. En la cima, en un principio aparecerá Cristo, resucitado en unas ocasiones, crucificado en otras. El origen de que sea una rama florida lo hallamos en la Biblia: "Saldrá un vástago del tronco de Jesé, y un retoño brotará de sus raíces" (Isaías 11, 1). El simbolismo iconográfico es patente: Jessé duerme como San Adán (24 de diciembre) y de su costado brota una generación. El tronco es vida, salud, salvación, por ello los Cristo crucificados sustituyen a los gloriosos paulatinamente, pues la raíz de Jessé se hace una, místicamente, con el madero de la cruz. Igualmente remite al árbol del Edén.

A partir del siglo XIV, la Santísima Virgen María comienza a ganar protagonismo en el tema iconográfico del Árbol de Jessé. Aunque no se desplaza a Cristo, este aparece como niño en los brazos de María, que pasa a ser la rama excelsa y la flor preciosa del árbol. El origen de esta nueva representación es la traducción tradicional de la Biblia hecha por San Jerónimo, el cual traduce "vástago" como "vara", en latín "virga", que también remite a "virgen". Es así que la Virgen María es el verdadero tronco de Jessé, siendo Jesús el retoño del que habla Isaías.

Volviendo a la Señora de Delft y al gremio de carpinteros. En 1567 elaboraron, o costearon, un espectacular conjunto que sirvió de trono a la Madre de Dios en la procesión y le dio nombre, solo tardíamente, pues en entre los siglos XIV y XVI no se le llama así. La solemnidad de tal procesión queda descrita en crónicas, y pocas habrá fueran tan solemnes y lucidas. Solo la de 1536 fue más austera, pues el 3 de mayo del mismo año había ardido gran parte de la ciudad y fallecido innumerables personas. La misma iglesia de San Bartolomé había ardido, aunque la estatua quedó intacta. Así que se realizó la procesión, pero con luto.

Declive y Renacimiento.
Lamentablemente, en 1566 la herejía calvinista se apoderó de Holanda y toda expresión de fe católica fue cercenada y prohibida. Cientos de imágenes fueron profanadas o quemadas, pero Nuestra Señora se salvó escondida. En 1577 hubo otra "redada" contra lo católico y la imagen desapareció. El catolicismo, brutalmente reprimido durante tres siglos, pudo respirar con más libertad en el siglo XIX. 


La imagen como luce hoy.
En 1929 el estudiante de arquitectura Jules Froger caminó solo, rezando en silencio siguiendo los pasos de la antigua procesión. Llevó el caso a la Asociación de Estudiantes Católicos de Santa Virgen de la Universidad Técnica y al año siguiente procesionaron 15 jóvenes. El hecho tuvo cierto eco y en 1931 ya participaron 300 hombres. Las autoridades, oficialmente calvinistas, dieron permiso y la procesión se recuperó con júbilo por parte de la Iglesia.

En 1939 un anticuario halló en La Haya una imagen medieval de la Santísima Virgen, que le pareció sería muy similar a la descrita en las crónicas sobre la antigua imagen. Los franciscanos la compraron, la llevaron a su iglesia de San José y comenzaron a promover su culto en aras de recuperar la devoción de los antiguos a Santa María de Jessé. Y lo lograron, pues el 8 de diciembre de 1941 se reinstauraba la Cofradía. En 1942 se bendecía una nueva capilla para la imagen. En 1990 la imagen fue trasladada a una nueva capilla y puesta tras un cristal.


Fuente:
http://heiligen-3s.nl


A 12 de junio además se celebra a:

San Odulf de Utrecht,
presbítero.
Santa Cunera,
virgen y mártir.
San Onofre, Penitente.



sábado, 21 de abril de 2018

"La Cruz es mi libro".

San Conrado de Parzham, religioso capuchino. 21 de abril.

Nació el 22 de diciembre de 1818 en Venushof, en una familia medianamente acomodada. A los 16 años quedó huérfano y tuvo que asumir labores del campo.

Durante su juventud acrecentó sus virtudes, siendo un chico piadoso, humilde y caritativo. Tuvo que aplazar su vocación a la vida religiosa a causa de la obligación para con sus hermanos. Cuando tenía 31 años y luego de un proceso no fácil, le admitieron en los Capuchinos, como Hermano lego. Profesó el 4 de octubre de 1852. Su primer, y último, destino fue la portería del bello santuario de Santa María de Altötting (15 de agosto). Allí, en aquella portería el Hermano Conrado se santificó y ayudó a la santificación de miles de personas. Consejos, oraciones, ánimos, exhortaciones, caridad. Vivía del todo para todos. Siempre con el crucifijo en el corazón y en los labios, decía: "La Cruz es mi libro. Una mirada a ella me enseña cómo debo actuar en cada circunstancia".

Fue también devotísimo de la Madre de Dios, con quien sostenía encendidas conversaciones, y a quien encomendaba a todos los que le pedían oraciones. A ella les enviaba siempre a pedir gracias y a ella les enviaba a dar gracias cuando se obtenían milagros. Tuvo Conrado los dones de profecía y conciencias. Fue propagado y colaborador de la obra "Liebesswerk", para el socorro de los niños abandonados.

43 años estuvo el Hermano Conrado en su portería, como un ángel para los peregrinos, hasta el 18 de abril de 1894, cuando se sintió enfermo y pidió ser relevado en la portería hasta recobrar fuerzas. Pero esa misma tarde ya supo que no volvería allí. Dijo al superior después de Vísperas: "Padre, ya no puedo más". En la enfermería pasó sus últimos días, agotado, pero sin dejar de sostener y besar su crucifijo y su rosario. El 21 de abril recibió el Viático, y aún en agonía, intentó ir a la portería cuando oyó sonar la campanilla varias veces: no podía pensar que no hubiera nadie para atender a los fieles.

Ese mismo día entró al cielo, apaciblemente, a los 76 años de edad. Sus funerales fueron muy concurridos, lo mismo que su sepultura, alcanzándose numerosos milagros por su intercesión. Fue beatificado el 15 de junio de 1930 y canonizado el 20 de mayo de 1934. 


Fuente:
-www.franciscanos.net


A 21 de abril además se celebra a:

Santa Almedha, virgen y mártir.

Santa Almedha, virgen y mártir. 1 de agosto.   Fue esta una de las legendarias hijas del rey de Britania, San  Brychan  ( 6 de abril ). Hast...